JULIÁN MITRE
Aunque la idea de los mundos paralelos no es nueva, en los sesenta DC Comics ya manejaba este concepto, actualmente es gracias al MCU que los multiversos estén de moda.
En de la B a la Z no hablaremos del cine de Marvel (no en este universo al menos) pero sí de multiversos, al menos de los que nos muestra la cinta Everything Everywhere All at Once ( titulada Todo en todas partes al mismo tiempo en Latinoamérica) producida este año, escrita y dirigida por Dan Kwan y Daniel Scheinert, dupla mejor conocida como los Daniels, a quienes debemos la extraña y divertida Swiss Army Man de la que hablaremos en otra entrega y que entre otras cosas es famosa porque Daniel Radcliffe interpreta a un cadáver multiusos y flatulento.
Todo en todas partes al mismo tiempo es protagonizada por Michelle Yeoh en el papel de Evelyn, una inmigrante china en los Estados Unidos que tiene problemas con Hacienda, un esposo que desea divorciarse y una hija molesta porque debe ocultarle su orientación sexual al abuelo. Como si esto fuera poco Evelyn descubrirá que el cuerpo de su esposo (quien interpretara a Data en Los Goonies) es ocupado por una versión de él mismo que ha viajado entre universos para advertirle que su realidad y todas las existentes se encuentran en peligro debido a una entidad que ha acumulado tanto odio que puede destruirlo todo y ella es la única capaz de evitar la catástrofe.
Entre el absurdo (parodias de Ratatouille, manos con dedos de salchicha, rocas que hablan sobre el sentido de la vida) artes marciales (se dice que en la preproducción se tenía considerado a Jackie Chan para ser el protagonista) y el melodrama, la cinta aborda temas como la inmigración, las brechas generacionales, la identidad sexual, la sensación de fracaso, la soledad y cuestionar cómo las decisiones que tomamos condicionan nuestras vidas, por lo que a pesar de la extravagancia y los excesos el espectador se encontrara ante una historia compleja, digna de verse más de una vez, debido a sus múltiples capas y posibles lecturas