Connect with us

SUSCRÍBETE

Columna

}}}pssst, pssst, Madigan… (49)

Alejandro García

…601 mil euros es lo que entregan al ganador del Premio Planeta. Anteriormente fue de 50 y de 100 millones de pesetas. Ahora te puedes gastar, estoico lector, goloso Madigan, esos biyuyos en cualesquiera de los países de la Comunidad Europea sin problema alguno. El premio de la competencia, ahora, Alfaguara, en realidad Penguin Random House, anda en los 175 mil dólares. Jorge Herralde cuenta en alguna parte la explicación que le da Álvaro Pombo sobre su decisión de salir del catálogo de Anagrama: tiene que ver por su futuro y los bellos libros de Narrativas hispánicas se acercan más al lector de culto que al productor de ganancias. Más que éstas, se trata de una cantidad que resuelve, por supuesto, tener que pelear las minucias que escurren de los contratos con las editoriales. Al margen de las polémicas de si este premio es otorgado desde fuera, como una especie de reconocimiento a la trayectoria, como se llegó a decir de Delibes y de Sábato, quienes finalmente no fueron premiados, o de Vargas Llosa y Cela, quienes sí lo recibieron, o de si tienen mano los escritores del catálogo de casa, o de algunos préstamos de campo como en los casos de Vallejo-Nágera y Savater, lo cierto es que este año se le otorga a Javier Cercas, quien viene de Acantilado, la anterior época de Tusquets y de Mondadori-Penguin Random House, por la novela “Terra alta”, la cual ya está en el mercado (398 pesos). El premio se otorga por primera vez en 1952 a Juan José Mira (que alguien me recomiende un libro de él ahora), en 1953 a Santiago Lorén (otro especialista en literatura española que me dé un raid con este autor) y por fin en 1954 a Ana María Matute. Respiro, por fin encuentro a una autora que ha sobrevivido de las espesas nieblas del franquismo y del juicio literario. Es hasta después de la muerte de Franco que son premiados autores como Marsé, Semprún y Vázquez Montalbán. Entre los escritores que en lo personal me parecen interesantes y aún hoy prometedores están Muñoz Molina, Millás y Cercas. Llama la atención que no se haya premiado una gran obra, que sean más bien productos de descanso o de realimentación dentro de las producciones. Esto sucede incluso en el caso de Matute, pero también en los de Vargas Llosa y Cela. Es claro que en algunos casos el premio será lo mejor o lo más destacado o vendido de un autor, pero no creo equivocarme si señalo que no marca rumbo o, lo deseable, hito, en la novelística española. En el caso de Cercas, confieso que voy a media trayectoria de Terra Alta. El oriundo de Cáceres, 1962, es un narrador muy hábil, de largo aliento y buen arquitecto de tramas. La novela da cuenta del asesinato de una pareja de pudientes ancianos horriblemente mutilados. Melchor es el policía que tendrá que resolver los enigmas de ese crimen, incluyendo su propio pasado. El bocado es atractivo y no cuesta tragarlo y degustarlo o vomitarlo como cuando los policías entran y sueltan la entraña viva al ver esos cuerpos machacados y salpicados con líquidos de sus propias tripas y sangre. Pero todo está todavía dentro de la cáscara de ciertos esquemas, el de la novela policiaca, el de la novela realista de un pasado pobre y pendenciero, el de la novela psicológica de un padre que quiere purgar sus penas con una vida ejemplar de esposa y padre. Frente a Soldados de Salamina, Anatomía de un instante, Las leyes de la frontera, El impostor, donde Cercas no sólo entraba a fajarse con los adjetivos de la novela, con los subgéneros, sino que también jugaba con la Historia, sobre todo a partir de la posible muerte Rafael Sánchez-Mazas, esta novela premiada me tiene en vilo, eso es bueno, pienso que me debe, será malo si no se escapa de sus propias condicionantes. Si esto sucede, sólo se enfilará en la tradición de este premio. Si rompe, puede señalar frontera y horizonte. Y claro, cómo envidio al pobre Javier Cercas que ahora tiene en la bolsa 12,362,570 pesillos. Ojalá, Madigan, se compadezca y nos invite un gimlet….  

S U S C R Í B E T E

Sé TESTIGO

DESTACADOS

DE LA B A LA Z. CINE GORE

Columna

TRAZOS DISPERSOS PARA ÓSCAR OLIVA

Columna

DE LA B A LA Z. LA TETRALOGÍA DE PEDRITO FERNÁNDEZ

Columna

ESPEJO DE DOBLE FILO: POESÍA Y VIOLENCIA (RESEÑA)

Poesía

S U S C R Í B E T E

Sé TESTIGO

Todos los derechos reservados © 2024 | Los Testigos de Madigan

Connect
S U S C R Í B E T E

Sé TESTIGO